¿Qué tan pura debe ser el agua en un laboratorio? Lo que nadie te explica
En laboratorio, los detalles importan. Usar agua con impurezas puede alterar resultados, contaminar tus reactivos o incluso dañar tus equipos. Aquí te explico qué tan pura debe ser el agua que usas, según el análisis que realizas.
🔹 Introducción
En muchos laboratorios de Saltillo, Monterrey y otras regiones del país, se usa “agua purificada” sin conocer realmente su calidad. ¿Es destilada? ¿Desionizada? ¿Cumple con la norma ASTM? ¿Es adecuada para tu tipo de análisis?
Cuando se trata de HPLC, cultivos celulares, microbiología o química analítica, la pureza del agua puede ser la diferencia entre un resultado confiable o una pérdida de tiempo y dinero.
En este artículo te explico, de forma sencilla y directa, qué tipo de agua se necesita en cada tipo de laboratorio y por qué no basta con que el agua “se vea limpia”.
🔹 El agua en el laboratorio no es opcional, es una variable crítica
El agua puede parecer inofensiva, pero es una fuente constante de contaminación si no se controla:
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Disuelve impurezas iónicas (sodio, cloruros, calcio, etc.)
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Puede contener compuestos orgánicos traza
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Transporta microorganismos invisibles
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Interfiere en reacciones químicas sensibles
Por eso, la norma ASTM D1193 clasifica el agua de laboratorio en niveles de pureza: tipo I, II, III y IV, en función de su conductividad, TOC, carga microbiana y contenido de sílice y sodio.
🔹 Tabla de tipos de agua según aplicación de laboratorio
🔹 ¿Qué tipo de agua usas hoy?
Hazte estas preguntas:
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¿Tu proveedor te entrega ficha técnica con la conductividad?
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¿Sabes si el agua cumple ASTM Tipo I, II, III o IV?
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¿Tienes residuos blancos en el fondo de tus frascos?
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¿Alguna vez has tenido fallas en análisis HPLC, microbiología o química?
Si la respuesta es sí o no estás seguro, probablemente estás usando agua incorrecta para tu laboratorio.
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📈 Cada tipo está pensado para una aplicación específica, desde laboratorios clínicos hasta investigaciones científicas.
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🔹 Conclusión
En laboratorio, el agua no es un gasto, es una herramienta de precisión. Elegir mal puede costarte reactivos, tiempo, confianza o incluso una auditoría negativa.
Elige el tipo de agua que tu análisis merece. Escríbenos y te asesoramos sin compromiso.
